Les étoiles

No necesita controlar su vida ni saber quien lo besa ni quien lo abriga. Es diferente. Solo quiere ser su amiga pero no quisiera morirse sin tener algo con él. Es extraño. Vero no está confundida, ella sabe lo que quiere, lo que tiene y lo que no puede suceder. Lo imposible sería posible en la luna, quizás en un viaje largo que solo ellos puedan vivir. Ahora solo queda cruzar una par de palabras instantáneas, morderse los dedos para no hablar mucho tiempo y controlar las madrugadas sin filtro social donde Vero desborda de sinceridad. 

Su espíritu descarriado no mide las consecuencias de sus actos, no analiza, no crea estrategias, no piensa, solo hace lo que siente y la mayor parte del tiempo no es lo correcto. Correcto para ella mas no para los demás. La vuelve loca su forma de ser. Su silencio, su ausencia, su falta de red social. Ya pasará, tiene que pasar, si no sabe cuándo empezó, quizás tampoco se de cuenta del final.

Caminar en linea recta es su debilidad, a pesar que no lo conoce, no sabe si cada historia contada es verdad o forma parte del aburrimiento de la madrugada. Ella siente curiosidad, cómo no hacerlo si le trae la noche con 5 estrellas y media luna, en su peor momento, para decirle que allí está. A cualquier hora lo puede encontrar.

¿Y de qué te sirve poseer las estrellas?

Me sirve para ser rico.

¿Y de qué te sirve ser rico?

Me sirve para comprar más estrellas.

Saint Exupery