Su chica

Dicen que un día tu vida cambia, de repente. Nunca creí eso hasta que sucedió. Suena a presentación de rehabilitación: "Hola, mi nombre es Verónica Rood y soy adicta a las manzanas, a Rodrigo y al sufrimiento".Me acepté. Fue genial. Esa madrugada decidí que es momento de arriesgar.

Quería conocer mi yo interior, necesitaba estar sola, pero amo a Rodrigo y prometí no alejarme jamás. Siempre fui "su chica", qué pasaría si por algún motivo él se va, no sabría qué hacer con mi vida porque lo único bueno que conozco de mi es ser "su chica". Esa chica que lo acompaña, lo espera y trata de no reclamar. Dejar de lado mi lugar de toda la vida iba a ser difícil, sin embargo llegó el día. 

Mis explicaciones quizás no sonaron racionales, terminar una relación de años solo para "conocerme" se prestaría a suspicacias. No me ofenderé si cree que lo dejé por otro, aunque la verdad lo dejé por mi. No soy egocéntrica, simplemente necesitaba saber cómo soy sin él. cómo me defiendo sin él, qué planes hago sin él. Quién está detrás de "su chica".

Soy la bruja malvada que lo sedujo con una manzana. Lo lamento. Es la primera vez que no soy mártir sino verdugo de mi vida. Se siente diferente, es como tomar el volante del carro y presionar el acelerador (aunque no sé manejar) aprenderé a conducir a mi estilo, con frenos bruscos, choques, pero aprenderé. Pensé que sería LA tragedia y solo fue LA libertad, que da esa sensación de preguntarte "Bien, ahora qué hago". 

Pues, digamos que hice algo productivo. Ahora trabajo. (sí, es raro, t-r-a-b-a-j-o) en algo que me encanta y no necesito usar tacos ni ropa apretada (envídiame). Conocí a Bico Vitolini, no es italiano, es un ser gentil que le gusta conocer más y más, memorizar nombres, fechas y datos que ignoro. Me cae bien (me caes bien) y me enseñó que las personas no son mi propiedad, que no las puedo comprar ni adherirme como garrapata. Cada uno es libre de hacer lo que desea.

Esa nueva forma de vida es poco tradicional. Soñaba con los "para siempre", "tu y yo sinapsis forever", "nos casaremos", etc. Me desprendí de lo que amo y deseo, para hacer lo que necesito. Ser yo, Verónica Rood.